Ciencia y Futbol... (Publicado el 20 de Julio)

Tal y como lo comenté en mi último blog, antes de lo que pensaba estaría escribiendo de nueva cuenta, y aquí estoy de nueva cuenta frente a la computadora, mas temprano que tarde.

Hace algunos días llego a mi correo electrónico, uno en el que circulaban un escrito de una niña Carolina Aranda Cruz (No hay relación alguna) de 10 años en donde criticaba el fútbol de México en un intento por adquirir adeptos para la ciencia y los científicos mexicanos. Dicho escrito lo pueden consultar en la siguiente dirección: http://comoenbotica.blogia.com/2007/061101-carolina-aranda-cruz-y-la-ciencia.php

He de reconocer que en su momento leí y descarté dicho correo, haciendo reflexiones mentales sobre sus razones y motivos, y los puntos de vista en los que coincidía y sobre todo en los que difería; a pesar de eso, como decía instantes atrás descarté el correo y seguí con lo que hacía.

Sin embargo (siempre hay un pero) el día de hoy mi buen amigo Luis Enrique (En su constante y permanente búsqueda de la verdad y el conocimiento) me reenvío el correo el cual me llegó después de varios intentos fallidos (Al parecer mi “amigo” no me tiene dado de alta en su Messenger ya que varias veces “me envio” el correo a una dirección equivocada). Cuando me preguntó si lo había leído, tengo que reconocer que le contesté con un escueto “Si, no me toca de nada. Al parecer los Aranda estamos en boga”.

Como me daría cuenta más adelante no era la respuesta que él esperaba de mi, por lo que procedió con un, un poco mas agresivo: “Se te resbaló?” (Como buen amigo, sabía que era el momento de tocar una de mis fibras mas sensibles y de qué manera hacerlo), y así fue como me decidí a salir de mi autoexilio de 48 horas del mundo del fútbol. Cabe decir que durante el citado exilio, mi sistema inmunológico me permitió sin mayor esfuerzo superar la nueva derrota, otra vez contra Argentina, ésta vez la selección femenil.

Y la verdad que por muy bonito que a la niña le haya quedado su discurso (Si acaso lo hizo sola), es más intelectualoide que intelectual; y se equivoca en varias cosas; hombre, la niña sólo tiene 10 años.

Primero que nada; el fútbol, y el deporte en general son ambientes de masas, la masa como tal es estúpida y no piensa, sólo actúa; y para ejemplo tenemos a los hermanos Oaxaqueños matándose a pedradas. Y no tiene nada que ver con el ambiente de la ciencia y la tecnología. En otras palabras, no podemos comparar la cerveza con el vino por más bonito que sonara hacerlo.

Con todo y lo anterior, así como hay pocos deportistas (no sólo futbolistas) mexicanos alrededor del mundo que son realmente exitosos, igual son pocos los científicos mexicanos alrededor del mundo que son exitosos; desgraciadamente, el nuestro, es un país donde no tenemos la cultura del apoyo y la cooperación, y mucho menos la del fomento y desarrollo de nuevos valores (En el área que gusten).

Lo que más me llama la atención es cómo se están ensalzando sus comentarios (Si acaso todo el documento salió de su inocente cabecita, o en su defecto fue mediocremente asesorada), cuando en realidad no propone nada; si acaso pide que se apoye más a la ciencia y estoy de acuerdo, pero no necesita decirlo una niña de 10 años para que sea cierto o para que por fin se haga, es algo que siempre ha sido necesario. A fin de cuentas, como concluía anteriormente no se puede comparar el vino con la cerveza, de hecho que yo sepa nunca le han quitado dinero a la ciencia para dárselo al fútbol.

Si el fútbol acaso fuera tan nocivo para los pueblos, creo que no sería el deporte más practicado del mundo y el que más dinero genera cada año. Allí está el fútbol europeo que siempre ha sido el mas poderoso, sin embargo este deporte también se desarrolla enormemente en Asia (En donde por muchos años se ha estado dando el mas fuerte desarrollo económico) y en Africa (El continente más atrasado del mundo). Y allí tenemos los casos de Argentina y Brasil, cuántos jóvenes se mantienen lejos de las drogas y la delincuencia gracias a éste deporte, lo que es más cuántos jóvenes se forman un futuro jugando al fútbol cuando su única opción era morirse de hambre o delinquir en la calle.

Si es necesario, también tenemos el caso de el deporte profesional norteamericano, cimentado totalmente en sus universidades y jóvenes universitarios (Algo que algún día deberíamos implementar en México), y no solo tienen al fútbol, también tienen el básquetbol, el béisbol, el hockey, el fútbol americano, el tennis, y no quiero mencionar los deportes olímpicos. Dónde estaría toda esa gente si no existiera la industria del deporte? Dónde estaría toda la gente que depende directa e indirectamente de esos deportes?

Y para terminar, el caso de México; el club Atlas acaba de exportar por 80 millones de pesos a un joven de 21 años, que pasaría con este mismo club si en lugar de ser 1 por año exportara 3 o 5 jugadores al año, eso sin hablar del ingreso económico que estos mismos jóvenes tendrán en el extranjero y que tal vez no alcanzarían a ganar aquí en México; dinero eventualmente llegará a nuestro país.

Y con ésta me despido porque ya llevo varios días sin poder terminar la presente. Y a mi estimada Carolina Aranda, le diría que la felicito enormemente por su interés en la ciencia, pero también le diría que considerara los beneficios del deporte tanto en salud como en economía.

De regreso a mi auto exilio,
Yorch